Migración versus ignorancia

Migración versus ignorancia

Fabián Núñez Valverde

En estos últimos meses hemos sido testigos de la ola migratoria hacia nuestro país desde Venezuela, fenómeno previamente conocido, pero totalmente nuevo en lo relacionado al volumen de personas entrando al mismo tiempo. Además, antes de la crisis en Venezuela recibimos a otras nacionalidades, colombianos, cubanos y africanos, claro está, en menor número. En todas y cada una de estas olas migratorias no falta la gente ignorante que en su carencia de pensamiento rechaza abiertamente la entrada y asentamiento de migrantes en el país. El ignorante es aquel que sabe que se dieron épocas similares en nuestro país en la que nos vimos obligados al igual que ellos, por el mismo factor económico y de supervivencia, a emigrar. El ignorante se ampara en los sentires personales, nada objetivos, como el robo de empleos por parte del emigrante frente al nacional, la inseguridad, la crisis del país, además que en este punto recién se hace visible la condición social de los desamparados nacionales existente y la falta de ayuda hacia estos.

La gente hoy en día odia la política, pero se atreve a opinar con desparpajo sobre la crisis humanitaria, verdaderas caricaturas producto de un sistema podrido, cortos de vista, faltos de pensamiento y sensibilidad. La crisis actual de nuestro país, Ecuador, es consecuencia directa de las malas políticas y la corrupción en todos los niveles de las que ya se sabía, pero, igualmente recién se hace visible y palpable. Echar la culpa de la situación económica al migrante es hacer un flaco favor a la clase dirigente al buscar un chivo expiatorio. Los insultos y odios deberían ser dirigidos a los verdaderos culpables de la situación política y económica; los políticos, su enriquecimiento a expensas del Estado y el sistema imperante.  Por otra parte, la crisis humanitaria venezolana responde a una dictadura genocida que lleva por arma la ignorancia y la ambición de un grupo de delincuentes que echaron sus raíces gracias al chavismo.  Estos delincuentes disfrazados de socialistas solo responden a la ambición de dinero y poder, es su único lenguaje. Hemos sido testigos por redes sociales del nivel de represión, violencia, persecución y muerte al que son objeto los manifestantes y disidentes venezolanos, también de la carencia de condiciones de vida y seguridad en su país de origen, estamos entonces hablando de un modo de vida que obliga a la gente a huir para sobrevivir. El Estado dictatorial tiene el capital y la fuerza represora para mantenerse en el poder ¿cómo exigimos entonces al pueblo venezolano que arregle los problemas en su país? La ignorancia y el poder son una mezcla extremadamente peligrosa.

En Ecuador existen personas de toda clase y condición social con distintos niveles de educación; desde el rico ignorante al rico educado, al igual que el borracho o el asaltante, el comerciante educado o el comerciante netamente ignorante, etc.  De igual manera sucede en la población migrante; los desplazados responden a distintos estratos, condiciones sociales y poseen distintos niveles de educación. Nuestra ignorancia también se manifiesta en el patriotismo y la generalización que hacemos a diario, no es adecuado pensar que porque un migrante se comportó irracionalmente esto responde a la forma de ser de toda la población migrante. Es inhumano el defender la idea de cerrar las fronteras, después de todo somos seres humanos nacimos en este planeta y nosotros inventamos la propiedad privada y las fronteras, somos una especie con fecha de caducidad que está de paso por el planeta, no fue hecho para nosotros, no nos pertenece. Así mismo somos críticos con las políticas migratorias en EE.UU o Europa, pero cuando tenemos que abrir las fronteras nos portamos igual o peor. A todo esto hay que añadir que Venezuela en la época de su esplendor nos recibió como migrantes. Todas las etnias y poblaciones a nivel mundial históricamente fueron migrantes, todas las culturas son producto de choques culturales obligados, en su ir y venir, empezando desde los romanos hasta los incas, no existen culturas aisladas y puras que no hayan emigrado para buscar mejores condiciones de vida.   

La falta de tolerancia y sensibilidad nos hace ignorantes e inhumanos, nuestra falta de cultura nos hace reproductores de un sistema injusto y privado que lleva y mantiene a asnos en el poder que son los principales responsables de todos los males existentes y futuros en las sociedades, haciendo a la vez difícil la situación de los trabajadores que buscan una mejor calidad de vida. Si el mundo no tuviera fronteras sería el inicio de un mundo más unido y justo. Todos estamos en el mismo barco, mañana podría hundirse nuestro lado. Ecuador también fue un país que ha presentado varias épocas históricas de migración, demostremos entonces con cultura y sesos que no somos un país atrasado, por lo menos, en nivel de humanidad y reciprocidad.